Si, lo sé. Todos corremos detrás del dinero y el amor...hasta que el cuerpo llama a la puerta. Da igual la edad: sin salud, todo lo demás importa menos. Mucho menos.

Osteopatía y Neurología Funcional en Donostia - San Sebastián e Ibiza.

23 años acompañando a personas a recuperar su dirección y salud.

Hola, soy Santiago Úbeda Carrillo,
Osteópata y especialista en neurología funcional.

Me dedico a la electricidad, mecánica y programación del cuerpo, entre otros títulos que la vida y los papeles me han dado. Porque lo que somos no cabe en diplomas.

La salud no se pierde de golpe.

Tampoco regresa con pastillas de colores, dietas de moda, ni poniendo disfraces al dolor.

Vuelve cuando aprendes a conducir tu vehículo y a conocer tus cartas 
Cuando sabes escuchar antes de que el cuerpo te grite.

No estás mal hecho. No eres un error.
Solo un manual de instrucciones sin leer.

Yo también estuve ahí.

Y me creí que debía acostumbrarme a vivir con molestias, a silenciar los síntomas  y normalizar el cansancio.
A tragar emociones y a ignorar las señales que duelen. Porque me dijeron que yo era así.

Es lo que veo cada día

Mira, me cansé de ponerle etiquetas al dolor. 

Da igual si lo tuyo viene por accidente, lesión, inflamación crónica, de un diagnostico hormonal,
un digestivo cabreado o de una tristeza que no se va.

No importa si alguien te dijo que «lo tuyo es para siempre», que es genético o que «hay que aprender a vivir con ello».

No me interesan los diagnósticos con apellidos.

Esta es Mi certeza de lo que juntos podemos conseguir.

Mails diarios

Un minuto de salud cada mañana, en dosis de palabra y conciencia.
Crudo. Práctico. Sin anestesia.

Toda causa de enfermedad es por una falta de conocimiento propio.

Para mirar de frente y entender la conexión entre tu cuerpo, tus relaciones, tus emociones y tu mente.
Por que todo lo que te rodea, deja huella en ti.

Hoy sigo aquÍ, con esa misma certeza:

la salud no es un fin, es el medio para vivir de verdad:

Para volver a subir tus montañas y respirar como quien se bebe el mundo.

Abrazar sin dolor, nadar mar adentro y comer sin culpa.

Dormir como quien no debe nada a nadie.

Viajar sin miedo a cansarte, jugar con tus nietos o bailar con quien amas…

…cuando otros ya no pueden.

Porque, dime:

¿de qué sirve alargar la vida si no puedes llenarla de todo esto?